28 sept 2007

paris chiquito




La Cuenca del Ecuador es de aquellas hermosas ciudades del mundo que ha heredado en su epidermis las huellas de lo que queremos poseer; fachadas con espíritu iluminista, juegos florales, homenajes eternos al "rey sol". Si la envidia tuviera un rostro, este sería uno de ellos.

"Sólo después de haber conocido la superficie de las cosas, se puede uno animar a buscar lo que hay debajo. Pero la superficie de las cosas es inagotable..." Italo Calvino.